Investigadores encuentran un “interruptor de apagado” para lograr un poderoso alivio del dolor

Saint Louis, Estados Unidos (19/11/14) – En una investigación recientemente publicada en la revista de medicina Brain, la investigadora de la Universidad de Saint Louis Daniela Salvemini, junto a doctores y colegas de dicha universidad, el Instituto Nacional de Salud (NIH, su sigla en inglés) y otras instituciones académicas han descubierto una manera de bloquear en modelos animales el camino del dolor crónico neuropático, que incluye al dolor causado por agentes quimioterapéuticos y el dolor del cáncer de hueso, lo que sugiere un nuevo y prometedor enfoque para el alivio del dolor.

Las labores científicas lideradas por Salvemini, que es profesora de ciencias fisiológicas y farmacológicas de la mencionada universidad, demostraron que al activar un receptor en el cerebro y la médula espinal se contrarresta el dolor crónico de los nervios en ratones tanto masculinos como femeninos. La activación del receptor A3, ya sea por su estimulador químico propio, la pequeña molécula adenosina, o por poderosas drogas de moléculas pequeñas sintéticas inventadas en el NIH, previene o revierte el dolor que se desarrolla lentamente producto del daño nervioso, sin causar, al mismo tiempo, tolerancia analgésica o recompensa intrínseca (a diferencia de los opiáceos).

Una necesidad médica insatisfecha

El dolor es un enorme problema. Su trato es una necesidad médica insatisfecha, el dolor provoca sufrimiento y viene acompañado por un millonario costo social. Los tratamientos actuales son problemáticos porque causan insoportables efectos secundarios, que disminuyen la calidad de vida y no proveen el suficiente alivio.

Los enfoques farmacológicos más eficaces para el tratamiento del dolor crónico se basan en ciertas «vías»: circuitos que implican los canales de opioides, adrenérgicos y calcio.

En la pasada década, los científicos intentaron sacar ventaja de estos caminos conocidos, las series de interacciones entre los componentes a nivel molecular que conducen al dolor. Mientras que la adenosina se mostró potencialmente útil para acabar con el dolor en humanos, los investigadores no aprovecharon lo suficiente este particular camino debido a que los receptores dirigidos implicaban muchos efectos secundarios.

Una clave para el alivio del dolor

En esta investigación, Salvemini y sus colegas demostraron que la activación del receptor de subtipo A3 de adenosina es clave en la mediación de los efectos de la adenosina para aliviar el dolor.

«Durante mucho tiempo se ha apreciado que el aprovechamiento de los efectos analgésicos potentes de adenosina podrían proporcionar un paso importante en el avance hacia un tratamiento efectivo para el dolor crónico», dijo Salvemini. «Nuestros hallazgos sugieren que este objetivo se puede lograr al centrar la labor futura sobre la vía A3AR, en particular, su activación proporciona una sólida reducción del dolor y en varios tipos de dolor», agregó.

Los investigadores son entusiastas al tener en cuenta que los agonistas A3AR ya son parte de ensayos clínicos avanzados como agentes antinflamatorios y anticancerígenos, y muestran un buen perfil de seguridad.

«Estos estudios sugieren que la activación de A3AR por pequeños agonistas altamente selectivos, como MRS5698, activan una vía reductora del dolor que apoya la idea de que podríamos desarrollar agonistas A3AR como posibles nuevas terapias para tratar el dolor crónico», sostuvo Salvemini.

Sobre los investigadores

La investigación fue en parte financiada por el Instituto Nacional del Cáncer (NCI, su sigla en inglés) y por el Instituto Nacional de Diabetes y Desórdenes Digestivos y Renales (NIDDK, su sigla en inglés).

Fundada en 1836, la Escuela de Medicina de la Universidad de Saint Louis fue la primera en adjudicar el grado de doctor al oeste del río Mississippi. La escuela educa médicos y científicos biomédicos, lleva adelante investigaciones médicas y proporciona cuidados en salud en el nivel local, nacional e internacional. La investigación en dicha escuela busca la cura y nuevos tratamientos en cinco áreas clave: cáncer, enfermedades del hígado, enfermedades del corazón y de los pulmones, envejecimiento y trastornos cerebrales, y enfermedades infecciosas.

El NIH, agencia de investigación a nivel nacional, incluye veintisiete institutos y centros y es parte del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos. El NIH es la principal agencia nacional en conducir y apoyar la investigación medica sobre causas, tratamientos y curas, tanto para las enfermedades más frecuentes como también para las enfermedades raras.

Versión en español: Ana Varco para AMANDOS

Versión original en inglés: http://www.slu.edu/x98903.xml