Impresiones en 3D podrían ayudar a restaurar funciones en los nervios dañados

(23/2/15) – Científicos de la Universidad de Sheffield han tenido éxito utilizando guías impresas en 3D para ayudar a los nervios dañados en incidentes traumáticos a repararse a sí mismos.

El equipo utilizó tal dispositivo para reparar el daño nervioso en modelos animales y dicen que el método podría ayudar a tratar muchos tipos de lesiones traumáticas.

El dispositivo, llamado “conducto guía de nervios” (NGC. sus siglas en inglés), es un armazón de tubos diminutos que conducen a los extremos del nervio dañado, uno hacia el otro, para que puedan repararse naturalmente.

Pacientes con lesiones nerviosas pueden sufrir pérdida completa de la sensibilidad en el área dañada, la cual puede debilitarse completamente. En la actualidad, los métodos para la reparación del daño nervioso utilizan la cirugía para suturar o injertar las terminaciones del nervio, práctica que a menudo obtiene resultados imperfectos.

Aunque algunos de tales dispositivos actualmente son utilizados en cirugía, estos solo pueden ser realizados con un rango limitado de materiales y diseños, lo que los hace adecuados solamente para cierto tipo de lesiones.

La técnica, desarrollada en la Facultad de Ingeniería de Sheffield, utiliza Diseño Asistido por Computadora (CAD, sus siglas en inglés) en el diseño de los artefactos, los cuales son fabricados usando escritura láser directa, una forma de impresión 3D. La ventaja de esto es que podrían ser adaptados para cualquier tipo de daño a los nervios, incluso en un paciente individual.

Los investigadores han usado guías impresas en 3D para reparar lesiones nerviosas utilizando un novedoso modelo de ratones desarrollado en la Facultad de Medicina, Odontología y Salud de Sheffield para medir la regeneración nerviosa. Ellos fueron exitosos al demostrar una reparación sobre una lesión de 3 mm en un período de veintiún días.

“La mejoría de la impresión 3D es que los dispositivos NGC puedan ser realizados con la precisión clínicamente requerida”, dijo John Haycock, profesor de Bioingeniería en Sheffield. “Hemos demostrado que esto funciona en modelos animales, por lo que el siguiente paso es probar esta técnica en la clínica», agregó.

El equipo de Sheffield utilizó un material llamado polietilenglicol, el que actualmente cuenta con un claro y probado uso médico y es también apto para el uso en la impresión 3D. “Además, ya se está trabajando en la investigación de artefactos hechos con materiales biodegradables, y también sobre dispositivos que puedan actuar sobre lesiones más extensas”, dijo el Dr. Frederik Claeyssens, profesor titular de  Biomateriales en Sheffield.

“Ahora necesitamos confirmar que los dispositivos actúan sobre las lesiones más grandes y afrontan los requisitos reglamentarios”, añadió Fiona Boissonade, profesora de Neurociencia en Sheffield.

 

Artículo original en inglés: http://medicalxpress.com/news/2015-02-3d-printed-function-nerves.html

Versión en español: Ana Varco para AMANDOS